de producción y de reproducción biológico y social que confiere al hombre
la mejor parte, así como en los esquemas inmanentes a todos los hábitos.
(p. 49).
En este sentido la dominación estará en poder de los hombres, en el caso de
que la sociedad tomando conciencia no haga las rectificaciones necesarias
puesto que los hombres y mujeres como seres humanos consientes y capaces,
están en condiciones de construir una sociedad justa y equitativa.
El rendimiento académico visto desde una posición de género
El rendimiento académico según Caballero, Abello y Palacio (2007), citado por
Lamas (2015), es, “el cumplimiento de las metas, logros y objetivos establecidos
en el programa o asignatura que cursa un estudiante, expresado a través de
calificaciones, que son resultado de una evaluación que implica la superación o
no de determinadas […] materias” (p. 315). En este sentido el rendimiento
académico demuestra el logro que alcanzan los estudiantes durante un periodo
de formación y preparación académica. La manera de indicar que los logros han
sido superados es mediante la representación de calificaciones cuantitativas y
cualitativas que se ha obtenido durante un proceso de formación académica.
Por su parte Guskey (2013), citado por Castejón (2014), señala, “el
rendimiento académico del estudiante es un constructo multifacético, que está
relacionado con diferentes dominios de aprendizaje, que se mide de formas
distintas y con diferentes propósitos” (p. 21). Es importante tener presente que
el rendimiento académico implica la realización de algunos factores dentro del
contexto educativo; para lograr este objetivo es necesario utilizar un sinnúmero
de instrumentos como: los test, las pruebas estructuradas a través de
indicadores de evaluación que permitan medir el constructo y conocer el
resultado del aprendizaje de los estudiantes.
Los resultados del aprendizaje son las habilidades y conocimientos que las y
los estudiantes adquieren, es decir, el producto del rendimiento es el conjunto de
una serie de factores que influyen interna o externamente en el estudiantado,
según la OCDE, (2011) señala:
Con este enfoque en los resultados de aprendizaje, las medidas confiables y
válidas de desempeño escolar pueden servir como base para políticas y
programas educativos para la rendición de cuentas, los procesos de mejora
escolar y para que familias y la sociedad en su conjunto cuenten con mayor
información sobre la efectividad de escuelas. (p. 3).
Es así que los resultados del aprendizaje son procesos que las y los
estudiantes logran luego de haber cumplido una serie actividades propuestas por
los docentes, dichos resultados son aquellos que se han obtenido después de
un largo proceso formativo, y que, habitualmente se encuentran representados
por calificaciones. Siendo lo más importante de esto los desempeños que
deberían evidenciar los estudiantes, es decir, los verdaderos cambios de
conducta, que más allá de expresarse en calificaciones se observan en los
modos de ser, sentir y actuar de acuerdo con las exigencias de una sociedad
que cambia y se transforma permanentemente.
Es importante considerar que un buen rendimiento académico hace pensar
que siempre deviene de un estudiante altamente capacitado, es decir, con
suficientes conocimientos, es más, capaz de ponerlos en práctica. La formación