los participantes. Aun así, la musicoterapia obtuvo cambios positivos para la gran
mayoría, mejorando conductas indeseadas, manteniendo el enfoque de atención
de los participantes y el desarrollo de destrezas sociales y de juego (Simpson y
Keen, 2011). Es decir que los PECS, Programa o Sistema de Comunicación por
Intercambio de Imágenes es otro de los modelos investigados. Los resultados de
las investigaciones indican que los participantes mostraron cambios positivos en
el desarrollo de destrezas de comunicación social, incremento en el nivel de
comunicación y lenguaje, incremento en habla, imitación y lenguaje espontáneo
e incremento en inicios de conversaciones, luego de participar del programa Tien
(2008) y Yoder (2009).
El estudio denominado “Repertorios comunicativos en la constelación autista”
Quiroz (2006) se basa en el desarrollo teórico de la pragmática de la
comunicación y la investigación del autismo desde la perspectiva de la teoría de
la mente, este artículo aporta elementos teóricos, metodológicos y empíricos
para la investigación de los sistemas comunicativos presentes en los contextos
cotidianos en que se desenvuelven dos niños diagnosticados con autismo.
Siguiendo con esta perspectiva, la posición que se desea destacar es aquella en
la que la interacción comunicativa se visualiza como un asunto no solamente
intersubjetivo, sino contextual objetivo, en donde el niño diagnosticado con
autismo y sus interlocutores, son copartícipes y co-ejecutores del lenguaje y la
comunicación. Ratificado también por Quirós (2006).
El Modelo DIR Floortime ayuda a los médicos, padres de familia y educadores
a realizar una evaluación completa a personas con espectro autista. DIR,
representa las capacidades de desarrollo de un niño; sus diferencias individuales
tales como: sensoriales, motoras, del lenguaje y la función cognitiva; tiene que
ver con las relaciones de aprendizaje que se adaptan a su perfil único. Una de
las metas de este modelo es establecer la comunicación, inicialmente el
especialista abre y cierra círculos no verbales, usando expresiones faciales,
gestos con las manos o incluso usando el tono de voz con el objetivo de lograr
la conexión con la persona autista.
El afecto (emoción) presta propósito y significado a la información que se
recibe a través de los sentidos. Sugiere que cuanto más un niño tiene un
aprendizaje basado en interacciones emocionales, más va a experimentar la
calidez y el placer de relacionarse. Esto se convierte en un refuerzo interno que
lo motiva a ser aún más espontáneo e interactivo. Esto mejora su capacidad de
pensar, sentir y experimentar relaciones más profundas. Tincani y Devis (2008).
Todas las técnicas de las metodologías aplicadas, en la búsqueda constante
de alcanzar la mejor comunicación con los niños/as del espectro autista, en el
tiempo no han sido evaluadas para continuar en la aplicación o sustituirlas,
constituyendo éstas un recurso del que pueda optimizarse de acuerdo a las
características individuales de cada uno de ellos.
En las diferentes épocas y todos los métodos para mejorar la comunicación
en el espectro autista, se han basado en la estructuración de imágenes que
varían en su complejidad, sin la aplicación de una evaluación en el tiempo para
innovar otro método, sin embargo, todas son similares en el sentido de uso de
imágenes con una estimulación eminente de percepción visual. Este particular
ha generado una omisión del análisis del vocabulario existentes en las edades
tempranas del espectro, el mismo que es muy particular en cada caso y que con
el desarrollo evolutivo del niño va siendo progresivamente menor en número de
palabras. Por tanto, nuestra la propuesta puede generar una comunicación,